sábado, 26 de septiembre de 2015

Caín-Canal de la Raya-Ostón-Canal de Culiembro-Caín

20/09/2015
El desnivel a salvar en esta ruta no supera los 600 m.
Comenzamos recorriendo el camino de El Canto Casiellas para después, y a través de la Senda del Cares llegar al inicio del Canal de la Raya por la que nos auparemos hasta las majadas de Ostón, bajando seguidamente por la Canal de Culiembro de nuevo a la Senda del la garganta del Cares por la que regresaremos a Caín.
Vista de Caín.
Salimos de Caín a cruzar el Cares por la Fuente Grande a la entrada del pueblo, e inmediatamente de superar el puente, giramos a la izquierda y tomamos el camino que pasa por unas cabañas, asciende por Telledo y Trechorio y después de cruzar algunas lleras, llegamos al punto denominado "Tramboscaminos" donde el sendero se desdobla: el de la derecha sube hacia el Sedo Mabro y el de la izquierda que es el que debemos elegir, sigue más o menos horizontal al principio y más adelante con tramos empedrados y muros laterales. Este el camino que se usaba cuando no había senda ni túneles en la garganta. El punto más alto de este sendero es el Canto Casiellas (575 m.) antes de cruzar la riega Casiellas nos desviamos a izquierda por le sendero de la Canal de Dobresengos que nos posciona en la Senda del Cares después de cruzar el río por un puente de cemento y subir unos escalones.

Continuamos por la senda durante algunos kilómetros hasta llegar al lugar de nombre La Huerta La Viña  donde tiene su origen la canal de la Raya por la que subimos hasta las majadas de Ostón. Enfrente y al otro lado del río, observamos la rectilínea canal de Sabugo. Ascendemos por un sendero casi perdido sobre un pedrero, siguiendo la orilla izquierda de la canal, estrecha e inclinada, y bajo los paredones rocosos que caen de Ante Rodru. Mientras recorremos el fondo de esta canal, debemos volver la vista hacia atrás para contemplar la surgencia del El Farfao en el Río Cares, La Canal de Sabugo y el Monte Llúe, así como el recorrido norte de la Senda del Cares.

Superados unos 160 m. de desnivel desde la Senda y cuando vaya disminuyendo el piso pedregoso de la canal y veamos que más arriba esta se cubre de maleza  vegetal, la abandonamos tomando un sendero por la izquierda estrechos y zigzagueante por el que ganamos cómodamente altura a través de La Posa El Suero y el Monte La Ardinal, un encinal de árboles diseminados por la ladera. Si nos asomamos hacia la loma sur de la canal, podemos contemplar las verticalidades de El Reguero La Paloma por donde discurre el sendero que procede de Culiembro a través de El Escaleru de Culiembro. Seguimos elevándonos hacia poniente para alcanzar El Boquerón, la parte baja de una vaguada donde la pradería comienza a ganar terreno en las laderas de pasto más bajas de Ostón. A nivel superior, cruzamos una valleja y entramos en la Cuesta Tresdureyu, una zona de pastos donde hoy seguramente ganado trabajando en ello. Cuando nos topamos con los muros de piedra, si nos desplazamos hacia la derecha, llegamos a Valdelafuente donde existe la única fuente de Ostón. Nosotros hemos de girar a la izquierda y siguiendo el muro de piedra vamos al encuentro de las majadas de Ostón (1000 m.). Desde aquí y hacia el sureste, podemos elevarnos por una loma con hierba hasta la cumbre de La Atalaya o La Peña (1062 m.) maravilloso balcón hacia el Macizo Central.

Ostón se asienta en la confluencia cimera de las canales de Culiembro y de la Raya y era a principios del siglo XVI un poblado estable, siendo Culiembro su invernal, al que se descendia con los ganados cuando la nieve hacía acto de presencia por encima de los mil metros de altitud. También en Culiembro existió un poblado que era el invernal de Ostón, levantado por ser cruce de caminos entre los dos macizos, con una ermita dedicada a San Julián y que desapareció con las obras del Canal.

Abandonamos los prados del Puerto de Ostón por la Cuesta Culiembro hacia el sur, y descendemos siguiendo una senda tallada en la roca y trazado zigzagueante por una canal secundaria, pasando  pasando por debajo de la Canal de Montuco que dejamos a la derecha y más alta. A mano contraria tenemos la cueva La Cruz que tiene escasa profundidad, y algo más abajo la cueva Posadorio (750 m.), utilizada como aprisco de cabras y ala que se puede acceder mediante una rampa-escalera con muro de piedra. Seguimos descendiendo por la pedreras y más abajo vemos que a ras de suelo en una oquedad, mana la fuente Gonzonera habiendo construido un pilón delante de ella para nada porque siempre está seca. Al acercarnos a la majada Culiembro, a nuestra izquierda tenemos la peña de igual nombre y en ella podemos observar la "antigua senda", anterior a la senda actual, que ascendía por El Escaleru hasta La Jorcadona y pasaba a la parte inferior de un cuenco pedregoso llamado Reguero La Paloma, pero que nunca lleva agua. Este sendero totalmente invadido actualmente por la hierba, arranca por la izquierda en una pequeña llanada llamada El Solar.

Seguimos descendiendo por La Nogaleda y unos metros más abajo rebasamos una nueva fuente, seca como la anterior y nos situamos de nuevo en la Senda del Cares por la que llegamos a Caín.










Ostón.

viernes, 25 de septiembre de 2015

Puerto Panderruedas-Vega Huertas-Mesones-Caín

19/09/2015.
Salimos de León a las 7:30. Como siempre que vamos a Picos tomamos el Café en Riaño. Hacemos doble desayuno. La ruta es dura y vamos a quemar todo. Yo apuro el pincho de tortilla en el Mentidero. Esas tortillas de patata que hace la camarera mientras pone cafés. En este bar tan pequeño cabemos los 50 y nos atienden a todos en los 30 minutos que dura la parada.
El día aparece despejado pero en Riaño hay una densa bruma que no permite ver los picos que bordean el pantano.
La Ruta de es larga, nos va a permitir atravesar el Macizo Occidental de sur a norte, desde el Ptº de Panderruedas a Caín. Desde el puerto (1460m) P1, atravesamos el área de descanso y tomamos una pista que nos lleva al mirador de Piedrashitas a través de un bosque de hayas.

 Pronto esta se bifurca en dos debiendo seguir la de la derecha, estrecho sendero que avanza a media ladera entre el bosque hasta alcanzar el arroyo de Guayes que acompañamos hasta su origen. A la derecha se abre un pequeño valle en ligera subida, lo remontamos siguiendo las lindes del bosque por un terreno despejado de árboles y matorral hasta el Collado Viejo (1638 m), formado por una pequeña explanada.
Tomamos dirección N, y comenzamos a subir en busca de un espolón de roca de conglomerados de colores vivos, debiendo hacerlo justo hasta su base por un tramo de bastante pendiente justo hasta tocar las rocas de color. Parece que el paso va a ser bastante aéreo, pero cuando alcanzamos las rocas, vemos que se abre un pasillo a la izda. Dicho pasillo es casi horizontal y de apenas un par de metros de ancho al principio, pero más adelante se ensancha a la vez que se interna en el bosque y por el que seguimos un poco por debajo de la línea de cumbres que pasa por la Cerra del Centenal. Pico Guadañas y Peña Dobres. Poco a poco salimos del bosque para seguir a media ladera hacia el Collado Dobres P2 al que nos dirigimos.



Desde este collado iniciamos la bajada hacia el NE por una amplia ladera hacia la pradera que forma el Pto de Dobres donde encontrarmos un panel de madera indicando un cruce de caminos. Debemos seguir el que indica hacia Caldevila y Soto de Valdeón para situarnos en el Collado Escobaloso. Caminando en dirección NE, bodeamos el Pico Abedular que dejamos a nuestra izda, pasamos por debajo de Horciello hacia la majada de Las Dorniellas para mas adelante enlazar con el camino que viene de la Vega de Llos por Collado Jover. Aquí nos agrupamos y comemos nuestra fruta.

Un pequeño tirón de ascenso girando ligeramente a la izda, y nos situamos en el Collado de Frade (1750 m.), donde encontramos un nuevo cartel indicando "A Vega Huerta" y "A Vega de Llos".

Seguimos caminando por la cresta divisoria a través de una senda aguda y silenciosa que traza varias lazadas a través de la cuesta que al principio no es muy empinada pero que, a medida que la vamos consumiendo se hace más imposible. Esta cuesta termina en la Cimera de Frade (1840m) desde la que descendemos unos metros en busca de la roca y la piedra. Bordeamos las paredes de Los Moledizos por incómodas e inclinadas pedreras para abordar el ascenso por la Canal del Perro P3, un estrechamiento pedregoso entre escarpadas agujas calizas. Por este camino llegamos a la Collada del Burro (2132m) para contemplar de frente, las paredes Sur de Torre Santa, El Diente, Las Garitas, etc..., todo un conjunto calizo de hoyos, agujas, canales, paredes,...




Continuamos por el Camino del Burro bien definido y señalizado por hitos y una franja de pintura amarilla, atravesando infinidad de hoyos y grandes agujeros en continuo sube-baja poniendo al caminar la máxima atención para no perder la senda. Bordeamos por su izda. Las Torres de Cotalbín y después de un corto descenso llegamos a Vega Huerta P4 (2043 m.), una zona herbosa en la base de las paredes de Torre Santa.


Collada del Burro.

Camino del Burro.


Vega Huerta. Pared sur de Torre Santa.
  Aquí tenemos un pequeño refugio de reciente construcción y a la derecha pasando una pequeña colladina una fuente con pilón. Hacemos tiempo y comemos el bocata y unos frutos secos. Bebemos agua de la fuente y descansamos de la dura subida.
Torre Santa.
Desde el refugio, caminamos por una campera unos metros hacia el NO y luego hacia le N hasta un herboso collado para tomar la senda que desciende por una loma de a Carbanal, que fue núcleo de un importante Puerto de ganado trashumante.


 Dejando a la derecha la senda que baja en busca de la Canal de Capozo, giramos ligeramente al NE e iniciamos una fácil subida hacia los Puertos de Cuba (1957m.), realzados con las Cerras del Rayo, del Frade y del Carbanal que rompen, citadas de izda. a derecha la alargada estrebación de Torre Santa hacia el SE para empalmar con la Torre de Los Cabritos. Elegimos la Cerra de Carbanal por ser la de menor altimetria y entramos en los Puertos de Cuba ya en tierras de Caín.

Caminando hacia los Puertos de Cuba.







Descendemos por las pandas herbosas hacia Jucabao, una depresión con césped y bloques de piedra en el fondo y que dejamos a izda. sin descender a él. Antes y a la derecha, habremos dejado la ladera que desciende de los paredones de Los Cabritos llamada El Tombo Cuba, salpicada de grandes peñascos y en la que todavía se pueden ver restos de los antiguos asentamientos de los rebaños trashumantes.

Rebasado el Hoyo Verde de Jucabao, nos encontramos en La Colladiella, una pequeña collada a la que llega por la izquierda un sendero muy marcado procedente de El Boquete que da paso al Jou Santo. A partir de aquí la senda está más marcada en la hierba e iniciamos de inmediato una fuerte bajada a través de la Cuesta Pelona hasta llegar a las Majadas de Mesones P5 (1412m.), de un gran historial ganadero. En estas majadas solo quedan en pie dos cabañas bien conservadas, una cubierta de teja y otra con techo de cemento; el resto presenta una estado completamente ruino y de abandono.

Abandonamos las majadas y por debajo de ellas a unos 200 metros no encontramos con la Fuente Mesones, restaurada hace poco tiempo pero sin agua en estas fechas. Seguimos descendiendo por la Cuesta de Jormigal y después de rebasar el Sedo la Novia por terreno arenizo. llegamos al Sedo Mesones, un paso delicado abierto al vacío por el lado derecho (sentido bajada) y tallado en la roca que nos puede causar algún problema si esta está mojada (y de hecho lo estaba, escurría el agua por la pared). Es un sedo que no tiene demasiada pendiente y no es muy largo, pero hay que pasarlo atentos. Al final la senda gira ligeramente a la derecha y unos escalones facilitan el terminar de bajar.

Superado un corto e incómodo pedrero, entramos en la cuesta El Almagrero por la que llegamos a un nuevo sedo, el Sedo Armao, un paso estrecho y tortuoso labrado en la roca, más empinado que el de Mesones pero más fácil de bajar, pues bajamos protegidos a ambos lados por paredes de roca verticales y con escalones en el suelo para facilitar la bajada. Prosiguiendo con nuestro descenso que ahora no resulta algo más cómodo, llegamos a la Fuente Cuciao (904 m.) también con pilón, pero esta con abundante caudal. Nos queda algo menos de una hora para llegar a Caín.

Pasamos al lado de la cascada de la riega La Pasada y nos adentramos poco después en la Cuesta Esteda por la que zigzaguea la senda,  bajo las paredes sureñas de Cueto Redondo. Seguimos descendiendo más cómodos y, después de rebasar La Nogaleda del Jo, nos adentramos en los prados y antiguas tierras de Caín donde la senda llanea, proporcionando un descanso a nuestras sufridas rodillas. Dejando atrás las cuadras de Caín de Arriba se puede descender por un sedo o por una pista hasta llegar a Caín de Abajo P6 (460 m.), dando por finalizada esta larga pero interesante Ruta.