Collado de Valdeteja-Sancenas-Cueto Calvo-Getino

Salimos de León el 17 de enero 2016 a las 8:30 aun es de noche y me tomo un café con todos los trasnochadores en le Pib. 1.50 eur, ¡qué pasada  precio!. Esta en centro de León pero al menos llega el periódico y puedo hojear las noticias.

El encuentro con los montañeros, amigos, compañeros es afable, ya son muchas rutas juntos y cada quince días toca nueva aventura.

Iniciamos la marcha en el collado de Valdeteja. Seguimos una senda marcada por un PR que ziczagueante nos lleva hasta Sáncenas. En seguida empezamos a pisar un 10 cm de nieve. Lo suficientemente dura como para no dificultar mucho el andar. Hemos subido 400 m. y la nieve acumulada ya es de unos 20 cm.

Sáncenas. Pico calizo, karts

Atacamos la subida a

Cueto Calvo haciendo nuestra aproximación desde el Pico Paredes desde donde se obiene una vista completa de de la carretera de Valdeteja. Aquí hay un poco de placa de hielo. Hay que pisar fuerte pero hay menos nieve acumulada por la pendiente.

Descendemos un poco y el próximo repecho ya tenemos a la vista el Pico Calvo.

Pico Calvo.

Los compañeros atacan la cubre por la izquierda. Yo decido con otros tres, entre ellos mi ya compañero Javier que con sus 70 y muchos anda los suyo, iniciar el descenso.
Nos aventuramos demasiado siguiendo las pisadas en la nieve que en el alto del valle es mucha y blanda. Uno mete el pie y llega hasta la rodilla. Nos colamos y en lugar de ir al sur seguimos norte para una vez terminado el altiplano descender bruscamente entre hayas. Alcanzamos un riachuelo que lleva poco agua. A saltos alcanzamos las antiguas praderas de pastos de Getino. Ahora llenas de maleza, escobas y zarzales. Hacemos aventura buscando una senda, un camino de vaca que nos lleve fuera de tanta maleza. Yo me aventuro por lo alto y casi en un terraplen doy con mis fatigados hueso en el abundante follaje. El andar se hace dificultoso, pero en seguida tomamos una senda que nos lleva a Getino. Es paralela al arroyo de Getino. Una vez en Getino el camino ya es duro asfalto por contraposición a la blanda nieve y nos tomamos una refrigerio en la venta de Amador. Dan comidas y son las cuatro.  A las 17 empieza a chispear nieve dura y inciamos el regreso con el atardecer oscuro de la montaña a hacia León.